Sus alumnas quedaron conocidas por realizar un canal de televisión en el Colegio Santa María de la Ligua, el CSMTV. En este, notifican y expresan su opinión acerca de lo que ocurre en el sector, con 72% de vulnerabilidad, y en el colegio mismo, donde estudian alrededor de seiscientas niñas.
Gracias al proyecto, el establecimiento pasó a integrar, en 2015, la Red de Escuelas Líderes de Educación en Pobreza, iniciativa impulsada por la Fundación Chile, Fundación Educacional Arauco, Minera Escondida y el diario El Mercurio.
Ella asegura que el éxito del proyecto se debe al esfuerzo de sus estudiantes que desde 2013 vienen desarrollando cápsulas informativas. Pero —lo sabemos— todo alumno tiene un profesor, por detrás, que lo apoya. En este caso, fue la profesora de Castellano María Teresa Docmac (26), quien ayuda a sus estudiantes a redactar los titulares del canal de televisión.
En la Red de Escuelas Líderes desde 2015, María Teresa (o “Tere”, como la llaman sus alumnas), realiza trabajo colaborativo, especialmente en encuentros nacionales y macro zonales que tiene con colegas de otras instituciones. Aquí, su opinión sobre el trabajo en red:
¿Cuál es la importancia de la Red de Escuelas Líderes?
“La importancia radica, especialmente, en la oportunidad de compartir y aprender experiencias educativas exitosas, que son completamente aplicables, pues (los colegios miembros de la red) pertenecen a contextos vulnerables como el que vivo en mi establecimiento. De esa manera, el trabajo en equipo fomenta aprendizaje significativo, te hace parte y con ello te involucras a cabalidad”.
¿Ser parte de la Red de Escuelas Líderes propicia el mejoramiento de contextos vulnerables?
“Sí, de todas maneras porque cada vez que un colegio en contexto de vulnerabilidad logra algo, tú, que estás en la misma situación, intentas replicarlo y mejorar tu propio establecimiento. En mi experiencia, este año fui a Olmué y en ese lugar aprendí sobre varios proyectos que deseo aplicar en mi colegio”.
¿Trabajar en una red es mejor que trabajar a solas?
“Sí, trabajar en una red siempre es lo óptimo, porque te sientes apoyada y guiada. Estando sola, uno se equivoca más y es difícil superar los obstáculos, ya que te desmotivas.
En la Red de Escuelas Líderes aprendí eso, que a veces el panorama no es alentador y que eso nos había pasado más de una vez a todos los que allí estábamos. También pude ver bien que después de eso venía el éxito, la ganancia para nuestras niñas… Eso es lo que te hace ponerte de pie otra vez”.
¿Es necesario movilizar las comunidades para que trabajen en conjunto?
“Sí, las comunidades necesitan movilizarse pues ese trabajo trae enriquecimiento. Así siempre se puede replicar lo bueno: al final, la idea no es solo que exista un colegio de excelencia, sino que todos, en comunidad, seamos excelentes”.
Entrevista por Amanda Marton.